Dos días más de olas grandes

Ayer el mar estaba desfasado en Sope, totalmente reventado por la acción del viento del noroeste que no paró de soplar en todo el día.

El baño estuvo el sábado a la mañana, cuando la borrasca todavía no había llegado, y las olas eran asequibles. No duró demasiado, en un abrir y cerrar de ojos el viento cambió y lo que antes era un mar ordenado se convirtió en una anarquía de olas y viento.

La nueva borrasca llegará hoy a su punto de inflexión con olas cercanas a los tres metros y vientos del oeste. Las condiciones no son buenas para el surfing aquí, pero desplazándose unos kilómetros al oeste seguro que uno encuentra un baño decente.

A partir de mañana el mar irá bajando su fuerza. Para mañana las olas serán de dos metros, todavía con viento del oeste. No hay que desesperar porque para el fin de semana las previsiones mejoran en cuanto al viento.