Más de lo que creía

Finalmente el viento aguantó bastante más de lo que me esperaba y el mar bajó menos. A primera hora de la tarde las olas rompían ordenadas en Sopela.

En un primer momento me parecío que había un baño, pero no tuve que esperar mucho para comprobar que no. En el momento en el que abrí el maletero para sacar el traje empezaron a llegar series de dos metrones huecos que rompían con violencia. Tan solo había una persona en el agua y pese a las ganas no pillaba nada. El frío hizo el resto para convencerme que lo dejase para otro día.

Hoy si que parece que va a bajar un poquito la fuerza del mar, pero el problema es que está previsto que el viento del noroeste aparezca a partir del medio día. Mañana llegará un nuevo swell que dejará olas de entre cuatro y cinco metros en nuestras costas y fuertes vientos del noroeste. Habrá que abrigarse.