Comprate un trozo de paraiso en las Mentawais

La misma compañía que en mayo puso a la venta la isla de Pulau Panangalat Sabeu, también conocida como A-Frames, en las Mentawais, justo frente a la costa de Karangmajat, hogar de Kandui, la ha vuelto a poner a la venta.

Los propietarios habían construido un Surf Camp a base de madera y bambú, y al parecer les iba bien. Pero llegó la pandemia, y pese a que siguieron trabajando para mejorar el complejo, la falta de surfistas supuso no tener ingresos y quedarse sin liquidez, obligándoles a ponerla a la venta.

 

En un primer momento, la propiedad, que llevaba a la venta desde 2021, se retiró después de que un inversor pusiera un depósito para comprar esta isla de 15.000 metros cuadrados, pero finalmente se echó atrás.

Ahora, International Surf Properties ha vuelto a poner a la venta la isla, pero esta vez con una novedad.

Si aparece un comprado serio, que pueda enfrentarse a un importe de un millón de dólares, se vendería entera. En caso contrario se dividirá en diez parcelas, cada una de las cuales se vende por 1.350.000 dólares.

 

Todo parece idílico. A-Frames tiene ola propia y está a un corto viaje en lancha de Rifles, Four Bobs, Kandui, Baby Kandui, Pistols, Karingbat Left y Malibu's, olas para diferentes niveles de surfistas, y por algo más de 100.000 dólares.

 

Pero Indonesia no deja a los extranjeros comprar la tierra. Es por eso por lo que se necesitan intermediarios.

"Todos los lotes disponibles están absolutamente frente a la playa y miden 1.500 metros cuadrados. Los compradores internacionales pueden comprar una parcela de tierra a su nombre bajo nuestra estructura de empresa de inversión extranjera según las pautas de la ley de inversión extranjera de Indonesia. Estas parcelas solo están disponibles, no las compra un solo comprador 100% de la corporación de Indonesia".

 

Básicamente, lo que dice esta frase es que como un extranjero no puede comprar tierra en Indonesia, la empresa se encarga de hacerlo por él. Aunque tampoco es una compra, porque  normalmente se compra el derecho de usar la tierra durante un periodo de tiempo, pero no la tierra en sí.

 

Actualmente la isla posee un Surf Camp, hecho básicamente de madera y bambú dado que tiene el rango de explotación forestal, pero la empresa asegura que podrás hacerte tu casa mirando la mar sin problemas.