Viaje al archipiélago olvidado
Ernest Henry Shackleton es una de las principales figuras de la conocida como Edad heroica de la exploración de la Antártida.
Su primera experiencia en las regiones polares fue como tercer oficial de la Expedición Discovery (1901-1904) del capitán Robert Falcon Scott, de la cual tuvo que regresar prematuramente por motivos de salud. Determinado a resarcirse de lo que él sintió como un fracaso personal, retornó a la Antártida en 1907 como líder de la Expedición Nimrod. En enero de 1909 él y sus tres compañeros hicieron una marcha que les llevó al punto más al sur jamás hollado por el hombre en la Antártida, en la latitud 88° 23′ S, a unos 190 km del Polo Sur. Por este logro, a su vuelta a casa, Shackleton fue nombrado sir por el rey Eduardo VII.
Al acabar la carrera por la conquista del Polo Sur con la victoria del noruego Roald Amundsen, Shackleton centró su atención en lo que él consideró el último gran objetivo de los viajes en la Antártida: cruzar el continente helado de punta a punta pasando a través del polo. Para este fin hizo los preparativos de lo que acabaría llamándose Expedición Imperial Transantártica (1914-1917). Sin embargo, la mala suerte se cebó con la empresa cuando su barco, el Endurance, quedó atrapado en una banquisa de hielo que lo fue aplastando lentamente y lo acabó hundiendo. Los exploradores estuvieron aislados más de dos años, pero gracias a la habilidad de su líder consiguieron regresar todos con vida del continente helado, una hazaña que llevó a Shackleton a ser considerado un héroe. En 1921 el explorador organizó un nuevo viaje a la Antártida con fines científicos, la Expedición Shackleton-Rowett, pero antes de que ésta llegara al continente helado, Ernest Shackleton sufrió un ataque al corazón y murió mientras su barco, el Quest, estaba amarrado en las islas Georgias del Sur. Fue enterrado allí por deseo de su esposa.
La historia de una de las mayores gestas en la historia de la exploración interesaba al realizador Ben Weiland por una razón muy diferente: Hacía referencia a las islas del Atlántico Sur y a sus olas. En sus memorias Shackelton hacía referencia a olas de 50 pies durante su estancia en las Islas Georgias del Sur, territorio subantártico deshabitado se encuentra bajo administración del Reino Unido.
Wiland se preguntaba si esas olas en esas islas deshabitadas serían surfeables. Tras años preparando el viaje, finalmente encontró financiación gracias a la marca Roark y convenció a Parker Coffin, Nate Zoller, LJ O'Leary, y al fotógrafo Dylan Gordon para acompañarle hasta estas olas olvidadas.
Surfearon en las Malvinas (Falklands) no en las Georgias del sur... eso hubiera sido bastante más difícil porque ahí si que no hay más que pingüinos y glaciares
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