Octavo ataque de tiburón en tres meses en Australia
Joel "Sonny" Mason, padre de tres niños, estaba surfeando ayer a la mañana en la playa Scotts Head, a 300 millas al norte de Sydney, cuando fue mordido por un tiburón, ha declarado la policía estatal de Nueva Gales del Sur.
"El hombre sufrió una grave lesión en la pierna derecha", ha dicho un portavoz de NSW Ambulance. "Sufrió cinco laceraciones profundas y una gran pérdida de sangre".
El surfista estaba en el agua junto con otros surfistas cuando fue atacado. "Uno de ellos lo vio desaparecer bajo el agua, con una descarga de agua y luego la víctima levantó el brazo para indicar que estaba teniendo un problema", dijo Donna Wishart, portavoz de Surf Life Saving.
El hombre fue trasladado a un hospital en estado grave, aunque en principio su vida no corre peligro.
Las autoridades han dicho que aún no se sabe qué especie de tiburón está involucrada.
Este es el octavo ataque en playas australianas en tres meses, en medio de un debate público sobre cómo reducir el riesgo de encuentros entre tiburones y el creciente número de personas que utilizan el océano para el ocio.
Nueva Gales del Sur, el estado más poblado de Australia, ha probado medidas no letales como drones para rastrear los movimientos de tiburones y las redes "inteligentes" que alertan a las autoridades sobre su presencia.
Australia tiene uno de los mayores incidentes de ataques de tiburones en el mundo, pero las muertes siguen siendo poco frecuentes.
Se han producido 16 ataques de tiburones "no provocados" en la costa del gran continente este año, incluida una muerte después de que un nadador fue atacado por un tiburón en las Islas Whitsunday a principios de noviembre, según datos del Zoológico de Taronga en Sydney.
Go Killer Slater
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